EDUCACIÓN PARA LA CIUDADANÍA Y LOS DERECHOS HUMANOS

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Los príncipes azules destiñen

Esperaba a mi príncipe azul pero nunca llegaba.
-Los príncipes azules no existen- decían unos.
-Los príncipes azules destiñen- decían otros.
-El que tenga que ser para , tuyo será- decía mi madre.
Mientras, las películas y los cuentos estaban repletos de príncipes maravillosos.
Y yo continuaba esperando...
Y aparecían príncipes y más príncipes...
Pero ninguno era azul y ninguno me daba la felicidad.
Así que un buen día dejé de esperar.
-No necesito un príncipe- me dije.
Y entonces ocurrió algo mágico. Mi corazón comenzó a llenarse y a expandirse, ¡parecía tener alas! Y de repente me dí cuenta de que todo este tiempo el amor había estado dentro de mí... Y yo no lo había visto porque estaba "esperando".
En aquel preciso instante me enamoré de mí misma.
¡Y luego apareciste tú!
Y tú no eras azul, ni perfecto, ni eras verde, ni amarillo, ni rojo... ¡Eras de todos los colores! ¡Eras maravillosamente imperfecto! ¡Eras de carne y hueso!
Y no me dabas la felicidad, sino que multiplicabas la que yo sentía. Y eras tierno, y dulce y me llamabas princesa. Y yo me sentía la princesa más afortunada del mundo, de la tierra y del universo porque, finalmente ¡había encontrado a mi príncipe!

Arturo y Clementina

NARRADOR.- Un hermoso día de primavera Arturo y Clementina, dos jóvenes y hermosas tortugas rubias se conocieron al borde de un estanque y aquella misma tarde descubrieron que estaban enamorados.
Clementina, alegre y despreocupada, hacía muchos proyectos para su vida futura mientras paseaban los dos a orillas del estanque y pescaban alguna cosilla para la cena.

CLEMENTINA.- Ya verás qué felices seremos. Viajaremos y descubriremos otros lagos y otras tortugas diferentes, y encontraremos otra clase de peces y otras plantas y flores en la orilla... ¡Será una vida estupenda! Iremos incluso al extranjero. ¿Sabes una cosa? Siempre he querido visitar Venecia...

ARTURO.- (Sonriendo vagamente). Sí.

NARRADOR.-Pero los días transcurrían iguales al borde del estanque. Arturo había decidido pescar él solo para los dos y así Clementina podría descansar. Llegaba a la hora de comer con renacuajos y caracoles.

ARTURO.- ¿Cómo estás, cariño? ¿Lo has pasado bien?

CLEMENTINA.-(Suspirando) ¡Me he aburrido mucho! ¡Todo el día sola esperándote!

ARTURO.- (Gritando indignado) ¡ABURRIDO! ¿Dices que te has aburrido? Busca algo que hacer. El mundo está lleno de ocupaciones interesantes. ¡Sólo se aburren los tontos!

NARRADOR.- A Clementina le daba mucha vergüenza ser tonta, y hubiera querido no aburrirse tanto, pero no podía evitarlo. Un día, cuando volvió Arturo...

CLEMENTINA.- Me gustaría tener una flauta. Aprendería a tocarla, inventaría canciones, y eso me entretendría.

ARTURO.- ¿TÚ? ¿Tocar la flauta tú? ¡Si ni siquiera distingues las notas! Eres incapaz de aprender. No tienes oído.

NARRADOR.- Aquella misma noche, Arturo compareció con un hermoso tocadiscos y lo ató bien a la casa de Clementina.

ARTURO.- Así no lo perderás. ¡Eres tan distraída...!

CLEMENTINA.- Gracias.

NARRADOR.- Pero aquella noche, antes de dormirse, estuvo pensando por qué tenía que llevar a cuestas aquel tocadiscos tan pesado en lugar de una flauta ligera, y si era verdad que no hubiera llegado a aprender las notas y que era distraída. Pero después, avergonzada, decidió que tenía que ser así, puesto que Arturo, tan inteligente, lo decía. Suspiró resignada y se durmió.
Durante unos días, Clementina escuchó el tocadiscos. Después se cansó. Era, de todos modos, un objeto bonito y se entretuvo limpiándolo y sacándole brillo; pero al poco tiempo volvió a aburrirse.
Un atardecer, mientras contemplaban las estrellas a orillas del estanque silencioso...

CLEMENTINA.- Sabes, Arturo, algunas veces veo unas flores tan bonitas, de colores tan extraños, que me dan ganas de llorar... Me gustaría tener una caja de acuarelas y poder pintarlas.

ARTURO.- (Riéndose) ¡Vaya idea ridícula! ¿Es que te crees una artista? ¡Qué bobada!

CLEMENTINA.- (Aparte) Vaya, ya he vuelto a decir una tontería. Tendré que andar con mucho cuidado o Arturo va a cansarse de tener una mujer tan estúpida...

NARRADOR.- Y se esforzó en hablar lo menos posible. Arturo se dio cuenta en seguida.

ARTURO.- (Aparte) Tengo una compañera aburrida de veras. No habla nunca y, cuando habla, no dice más que disparates.

NARRADOR.- Pero debía sentirse un poco culpable y, a los pocos días, se presentó con un paquetón.

ARTURO.- Mira, he encontrado a un amigo mío pintor y le he comprado un cuadro para ti. Estarás contenta, ¿no? Decías que el arte te interesa. Pues ahí lo tienes. Átatelo bien porque, con lo distraída que tú eres, ya veo que acabarás por perderlo.

NARRADOR.- La carga de Clementina aumentaba poco a poco. Un día se añadió un florero de Murano.

ARTURO.-¿No decías que te gustaba Venecia? Tuyo es. Átalo bien para que no se te caiga. ¡Eres tan descuidada!

NARRADOR.- Otro día llegó una colección de pipas austriacas dentro de una vitrina. Después una enciclopedia...

CLEMENTINA.- (Suspirando) Si por lo menos supiera leer...

NARRADOR.- Llegó un momento en que fue necesario añadir un segundo piso. Con la casa de dos pisos a sus espaldas, ya no podía ni moverse. Arturo le llevaba la comida y esto le hacía sentirse importante.

ARTURO.- ¿Qué harías tú sin mi?

CLEMENTINA.- (Suspirando) Claro. ¿Qué haría yo sin ti?

NARRADOR.- Poco a poco la casa de dos pisos quedó también completamente llena. Pero ya casi tenían la solución: tres pisos más se añadieron ahora a la casa de Clementina que hacía ya mucho tiempo que se había convertido en un rascacielos.
Una mañana de primavera decidió que aquella vida no podía seguir más tiempo. Salió sigilosamente de la casa y se dio un paseo: fue muy hermoso, pero muy corto. Arturo volvía a casa para el almuerzo y debía encontrarla esperándole. Como siempre.
Pero, poco a poco el paseíto se convirtió enana costumbre y Clementina se sentía cada vez más satisfecha de su nueva vida. Arturo no sabía nada, pero sospechaba que ocurría algo.

ARTURO.- ¿De qué demonios te ríes? Pareces tonta.

NARRADOR.- Pero Clementina esta vez no se preocupó en absoluto. Ahora salía de casa en cuanto Arturo volvía la espalda y él la encontraba cada vez más extraña, y encontraba la casa cada vez más desordenada. Pero Clementina empezaba a ser verdaderamente feliz y las regañinas de Arturo ya no le importaban.
Y un día Arturo encontró la casa vacía. Se enfadó muchísimo y no entendió nada. Años más tarde seguía contándoles lo mismo a sus amigos.

ARTURO.- Realmente era una ingrata la tal Clementina. No le faltaba de nada. ¡Veinticinco pisos tenía su casa, y todos llenos de tesoros!
NARRADOR.-Las tortugas viven muchísimos años y es posible que Clementina siga viajando feliz por el mundo. Es posible que toque la flauta y haga hermosas acuarelas de plantas y flores. Si encuentras una tortuga sin casa, intenta llamarla: ¡Clementina! ¡Clementina! Y si te contesta, seguro que es ella.

martes, 23 de noviembre de 2010

25 de noviembre: Día Internacional de Lucha contra la violencia de género

El 25 de noviembre fue declarado día Internacional contra la Violencia hacia la mujer en el Ier Encuentro Feminista de Latinoamérica y del Caribe celebrado en Bogotá (Colombia) en julio de 1981.

Se eligió el 25 de noviembre para conmemorar el violento asesinato de las hermanas Mirabal (Patria, Minerva y Maria Teresa), tres activistas políticas asesinadas el 25 de noviembre de 1960 en manos de la policía secreta del dictador Rafael Trujillo en la República Dominicana.

Sus cadáveres destrozados aparecieron en el fondo de un precipio. Para el movimiento popular y feminista de República Dominicana históricamente estas mujeres han simbolizado la lucha y la resistencia.

En 1999, la ONU dio caracter oficial a esta fecha.
Tres años después de la aprobación de la Ley Integral contra la Violencia de Género, el número de víctimas ha aumentado. Ya van 69 muertes en lo que va de año.

A 15 de noviembre, en España 65 mujeres han sido asesinadas a causa de la violencia machista (según fuente del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales):

26 fueron asesinadas por su cónyuge
4 fueron asesinadas por su ex cónyuge
19 fueron asesinadas por su compañero sentimental
6 fueron asesinadas por su ex compañero sentimental
5 fueron asesinadas por su novio
3 fueron asesinadas por su ex novio
1 fue asesinada por determinar

Hoy la violencia de género es la principal causa de muerte de mujeres, por encima del cáncer.
Algo está fallando cuando los datos siguen en aumento. Posiblemente sea incumplimiento del llamado Pacto de Tolerancia Cero contra la Violencia de Género, por parte de la sociedad, en definitiva, crear una verdadera conciencia del problema.

Como materiales de reflexión y debate, en este blog tenemos el cuento de Ferdinando el toro,el de La mitad de Juan, Los príncipes azules destiñen, Arturo y Clementina y la canción  Que nadie cantada por  Carrasco y Malú que te queda en este vídeo.



Aquí tienes un listado de libros que abordan el tema de la coeducación:

 Abella T.: M de Mujer, ed. Intermón-Oxfam, Colección Alfabeto Solidario
 Carl, Eric: Don caballito de mar, ed. Kokinos
 Domínguez, María: A papá le asustan las tormentas, editorial Jirones de Azul.
 Giménez, Teresa: Los príncipes azules destiñen, Editorial Beascoa
 Gómez Cerda, Alfredo: Oliver Button es una nena, ed. Everest
 Härtling, P.:Ben quiere a Anna, ed. Alfaguara
 Keselman Porter, Gabriela: Este monstruo me suena; ed. La Galera
 Monço, Beatriz: Mercedes quiere ser bombera, ed. Bellaterra
 Otten, Manuela: Niños valientes, ed. Serres
 Turín, A.: Arturo y Clementina, ed. Lumen
 Ugidos Silvia, Mi padre es ama de casa. ¿Y qué ?. Editores Asociados

sábado, 20 de noviembre de 2010

20 de Noviembre: Día Internacional de la Infancia‎


Te dejo el cuento Marcos y Mosés escrito por Carmen Posadas.

MARCOS Y MOSÉS.
Marcos nació en una familia de siete hermanos. Su madre tuvo un parto difícil, pero gracias a la ayuda médica, nació sin ninguna tara.
Mosés también tiene siete hermanos. Durante el embarazo, su madre tuvo problemas y él nació con un pulmón oprimido que ahora le impide respirar con normalidad. Mosés nació ayudado por su tía y su abuela, expertas ganaderas.
Marcos disfruta de una alimentación sana y equilibrada. Come verduras, come carne, pescado, hierro, hidratos de carbono...
A Mosés se le cayeron los dientes debido a la desnutrición.
La comida preferida de Marcos es el pollo y el jamón serrano.
Mosés no los ha probado nunca, pero seguro que le gustarían.
Marcos tiene un abrigo de cuadros para los días de frío.
Mosés tiene más suerte, porque en su país casi nunca hace frío y no necesita ropa. Es una suerte doble, porque aunque la necesitara, tampoco la tendría.
Marcos sale de su casa para ir a jugar al parque y dar un paseo.
Mosés siempre está fuera de casa.
Marcos no conoce a su padre y no sabe dónde está.
Mosés tampoco lo conoce, pero sabe que murió en la guerra, aunque no contra quién luchaba.
Marcos no irá nunca al colegio ni aprenderá a leer.
Mosés tampoco.
La esperanza de vida de Marcos es de unos 20 años.
La de Mosés es mayor, pero él quizá no llegue a cumplir los 20.
Marcos es un setter irlandés.
Mosés, un niño africano.
    Carmen Posadas

lunes, 15 de noviembre de 2010

Aung San Suu Kyi, Premio Nobel de la Paz en 1991

Aung San Suu Kyi, la activista por los Derechos Humanos y la libertad en Birmania, Premio Nobel de la Paz en 1991 y cofundadora del principal partido de la oposición en Myanmar (la Liga Nacional para la Democracia), ha sido  liberada el 13 de noviembre después de pasar más de 15 de los últimos 21 años detenida tanto en prisión como en arresto domiciliario. En Myanmar, más de 2.200 personas siguen encarceladas por motivos políticos.
El Premio Nobel de la Paz, lo recogió entonces en su nombre, su hijo mayor, Alexander (de 13 años).
Siguiendo la política de "no violencia" del Mahatma Ghandi, en su primer discurso después de ser puesta en libertad, dijo: “Si queremos conseguir lo que deseamos, tenemos que hacerlo de la forma correcta”.

sábado, 13 de noviembre de 2010

Luis García-Berlanga Martí (1921-2010), solidario con las enfermedades olvidadas

Hoy nos deja, Luis García-Berlanga Martí (Valencia, 12 de junio de 1921- Madrid, 13 de noviembre de 2010), director y guionista de cine español, cuyo "último legado" fue este anuncio publicitario. En él, protagoniza la campaña "pastillas contra el dolor ajeno", apoyando así a la ONG Médicos Sin Fronteras en su lucha por tratar a personas que padecen enfermedades olvidadas. Son caramelos de menta que se presentan en un envase de 6 unidades, una por cada enfermedad olvidada. Cuestan 1 euro y los fondos que se recauden se destinarán a financiar proyectos de MSF de tratamiento de estas enfermedades.
Berlanga padecía Alzheimer.



Tienes más datos sobre su biografía en esta entrada del blog de Mar.