EDUCACIÓN PARA LA CIUDADANÍA Y LOS DERECHOS HUMANOS

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Los príncipes azules destiñen

Esperaba a mi príncipe azul pero nunca llegaba.
-Los príncipes azules no existen- decían unos.
-Los príncipes azules destiñen- decían otros.
-El que tenga que ser para , tuyo será- decía mi madre.
Mientras, las películas y los cuentos estaban repletos de príncipes maravillosos.
Y yo continuaba esperando...
Y aparecían príncipes y más príncipes...
Pero ninguno era azul y ninguno me daba la felicidad.
Así que un buen día dejé de esperar.
-No necesito un príncipe- me dije.
Y entonces ocurrió algo mágico. Mi corazón comenzó a llenarse y a expandirse, ¡parecía tener alas! Y de repente me dí cuenta de que todo este tiempo el amor había estado dentro de mí... Y yo no lo había visto porque estaba "esperando".
En aquel preciso instante me enamoré de mí misma.
¡Y luego apareciste tú!
Y tú no eras azul, ni perfecto, ni eras verde, ni amarillo, ni rojo... ¡Eras de todos los colores! ¡Eras maravillosamente imperfecto! ¡Eras de carne y hueso!
Y no me dabas la felicidad, sino que multiplicabas la que yo sentía. Y eras tierno, y dulce y me llamabas princesa. Y yo me sentía la princesa más afortunada del mundo, de la tierra y del universo porque, finalmente ¡había encontrado a mi príncipe!

No hay comentarios:

Publicar un comentario